“Me acuerdo de personas muy próximas que tienen familiares con discapacidad y veo que es una labor sobrehumana, que realizan con todo su amor y toda su capacidad. Que haya entidades como Upacesur que estén ahí para cubrir todo aquello que la familia no puede es simplemente maravilloso”. Así se explicaba Nicolás Domecq Oriol, director de la oficina de IberCaja en Jerez de la Frontera, tras visitar las instalaciones de Upacesur para refrendar el compromiso de implicación con esta organización.
IberCaja, a través de su Fundación, ha colaborado este año económicamente en el programa de rehabilitación de la organización, a través de la convocatoria 2018 IberCaja de Proyectos Sociales, del mismo modo que lo hizo en 2016 y en 2014. Pero además también ha participado en programas de integración social, de hidroterapia e incluso en la ampliación de la Unidad de Día en el año 2010. Es por ello que Domecq Oriol comentaba la importancia de la existencia de la obra social en las entidades bancarias y su preocupación por el entorno local, “es una forma de decirle a la sociedad que somos muy cercanas a lo que pasa a nuestro alrededor y que nos preocupa poder devolver parte de nuestro beneficio a causas tan necesarias como ésta”.
El programa de rehabilitación con el que colabora IberCaja trabaja en mejorar la vida de un centenar de niños y jóvenes de 6 a 16 años, constituyendo uno de los pilares fundamentales para la asistencia de este colectivo en aspectos como la fisioterapia, la logopedia o la psicología. Por su parte, el director general, Rafael Márquez, comentaba la importancia de incorporar y mantener colaboraciones de este tipo. Asimismo, Domecq Oriol desgranaba que, entre los requisitos que exige la Fundación IberCaja se encuentra la existencia de un vínculo de la organización con la entidad bancaria y que además esta organización tenga un plus de profesionalidad.
* Upacesur nació hace 40 años en Jerez de la Frontera de la mano de una serie de familias que decidieron unirse para lograr una estructura fuerte y trabajar en beneficio de sus familiares afectados de parálisis cerebral y otras discapacidades afines. Esta organización se levanta sobre su esfuerzo y su cariño pero también lo hace sobre la profesionalidad de sus trabajadores. En la actualidad, anualmente atendemos a una media de 600 familias que acuden a estas instalaciones en busca de un apoyo profesional fundamental, pero también humano.
